– ¿Mi amor, a ti en qué animal te gustaría reencarnarte?
– Bueno, nunca lo había pensado, pero me gustaría ser perro.
– ¡No, no se vale repetir!
– ¿Mi amor, a ti en qué animal te gustaría reencarnarte?
– Bueno, nunca lo había pensado, pero me gustaría ser perro.
– ¡No, no se vale repetir!