– ¿Cuál es la propina acostumbrada?, le pregunta un tipo al repartidor de pizzas, Pepito, estudiante universitario que hace este trabajo para ayudarse a pagar los estudios.
– Pues, esta es mi primera entrega, pero el tipo que me dio el trabajo dice que si logro que usted suelte una moneda de 25 centavos, va a ser un milagro.
– ¿Ah, sí?, gruñe el cliente, pues, en ese caso, ¡Toma $5!
– ¡Gracias, señor!, exclama Pepito, pondré el dinero en el fondo para mis estudios.
– Y, a propósito, ¿Qué carrera estás estudiando?
– Sicología aplicada, contesta el chico.