Dos empleados llegan a una casa, para el Censo de población, y preguntan:
– ¿Su nombre?
– Adan.
– ¿Su Esposa?
– Eva.
– ¿Increíble! ¿Por casualidad la serpiente también vive aquí…?
– Sí, un momento.
– ¡Suegraaaa, la buscan!
Dos empleados llegan a una casa, para el Censo de población, y preguntan:
– ¿Su nombre?
– Adan.
– ¿Su Esposa?
– Eva.
– ¿Increíble! ¿Por casualidad la serpiente también vive aquí…?
– Sí, un momento.
– ¡Suegraaaa, la buscan!