Estaba Juan en el gym como todos los días cuando de repente entra Pepe.
-Hombre Pepe, ¿tú por aquí? Si nunca habías venido.
-Ya ves, ahora voy a hacer pesas.
-¿Y eso, quieres ponerte en forma?
-Sí, más bien es por mi mujer. Me dijo que no volviera hasta que no pudiera mantener la casa.