Un hombre sale del bingo, sin blanca. Era muy tarde ya y fue a coger el único taxi que había en la puerta:
– Quiero ir a Aranjuez, le dice.
– Serán 50 € por adelantado.
– Ahora mismo no tengo nada, lo he perdido todo en el bingo pero si me llevas, al llegar te daré 60 €.
– Pues entonces no te llevo; búscate la vida, ¡pringao!
Pasa una semana y el mismo hombre canta un bingo de 3.000 €. Al salir del bingo se encuentra la hilera de taxis; el que no le quiso llevar estaba el último. Después de pensar en cómo vengarse del taxista, entra en el primer taxi y enseñando el dinero le dice:
– ¿Cuánto cuesta ir a Aranjuez?
– 50 €.
– Te doy 600 € si al llegar me la chupas.
– No.
A continuación prueba con el siguiente:
– ¿Cuánto cuesta ir a Aranjuez?
– 55 €.
– Te doy 600 € si al llegar me la chupas.
– ¡Ni por 6.000 €, mariconazo!
Y así con todos los taxis de la hilera, hasta que llega al taxista del que se quería vengar:
– ¿Cuánto cuesta ir a Aranjuez?
– 50 € por adelantado.
– Te doy 60 € si bajas la ventanilla y, al ir pasando junto a tus colegas, les saludas con una sonrisa diciendo ¡me voy a Aranjuez!