-Te veo muy nervioso, ¿qué te pasa? -Vengo de enterrar a mi suegra. -Bueno hombre, no es para tanto. -Es que la condenada no se dejaba enterrar.
-Te veo muy nervioso, ¿qué te pasa? -Vengo de enterrar a mi suegra. -Bueno hombre, no es para tanto. -Es que la condenada no se dejaba enterrar.