Un matrimonio está en la cama y de repente la mujer le pregunta al marido:
– Cariño, ¿Qué harías si yo muriese?
– Pues, no sé, ¿Por qué?
– ¿Te volverías a casar?
– No, en absoluto.
– ¿Es que no te gusta estar casado?
– Sí, pero…
– Entonces, ¿Por qué no te volverías a casar?
– Pues, bueno, vale, probablemente volvería a casarme.
– ¡Aaaah! (Con cara de herida en su amor propio) ¿Y vivirías con ella en nuestra casa?
– A menos que ella tuviese otra, creo que sí.
– (Con cara de fastidio) ¿Y dormirías con ella en nuestra cama?
– Pues sí, me imagino que sí.
– (Ya muy enojada) ¿Y dejarías que se vistiese con mis ropas?
– No sé, si ella quisiese, ¿Por qué no?
– (Ya casi pensando en el divorcio) Vaya, vaya, ¿Y cambiarias mis fotos por fotos suyas? (Saliendo de la cama mientras apunta amenazadoramente con el dedo) ¿Y la dejarías usar mis palos de golf?
– Ah no, eso si que no. ¡Ella es zurda!
Todas las entradas de: admin_humor_sa
Iban tres hombres
Iban tres hombres de viaje en un bote, cuando de pronto fueron atrapados por una tribu de indios. Después de amarrarlos, los reos fueron llevados con el jefe indio. El jefe indio le preguntó al primero:
– ¿Tú cómo querer morir?
– A mí traerme una inyección letal.
Se la traen y se mata.
El jefe indio dice:
– Quitar piel, secar sol y hacer canoa.
Después le pregunta al segundo, el que le pide que le traigan una pistola y se dispara.
El jefe indio dice:
– Quitar piel, secar sol y hacer canoa.
Por último le pregunta al tercero:
– ¿Tú cómo querer morir?
– No pos’, a mi tráeme un pica hielo primo.
Se lo traen y se empieza a dar con el pica hielo en todo el cuerpo y le dice al jefe indio:
– Mira lo que hago con tu canoa, ¡Canoa querían!
Está entremedio del río, no se moja, y no tiene frío, ¿qué es?
Está entremedio del río, no se moja, y no tiene frío, ¿qué es?
La letra i
Llegó un Atlante
Llegó un Atlante a comprar un boleto y le dice a la señorita:
– ¿Me da un boleto para Oaxaca?
Y la señorita se lo da. Al poco rato regresa y le dice a la señorita:
– Me da un boleto para Polonia, y la señorita le dice:
– No, para Polonia no hay.
En eso le dice el Atlante a su compañera:
– Ni modo Polonia, ¡Aquí te quedas!
Era una vez un tomatito
Era una vez un tomatito y una tomatita y iban caminando por la calle. Venía pasando un carro y atropelló al tomatito. La tomatita le preguntó al tomatito:
– ¿Qué te hicieron?
Y dice el tomatito:
– Ketchup